El 13 de julio de 1896 el Sr. Obispo Dr. Fray Ramón Martínez Vigil hizo presente a la corporación municipal su deseo de llevar a cabo en el mes de agosto la colocación de la primera piedra de San Lorenzo. La solemne ceremonia de colocación de la primera piedra del templo de San Lorenzo, tuvo lugar el domingo 23 de agosto de 1896. Después de la ceremonia, se repartieron entre los concurrentes láminas con la vista de la nueva iglesia, según el proyecto del arquitecto diocesano Sr. Bellido, y por la noche hubo iluminación y música en el paseo de Begoña.

Las obras de cimentación de la iglesia de San Lorenzo no comenzaron hasta enero de 1897.  Para ello se necesitaban medios económicos y no resultó tarea fácil. Se trataba de levantar un templo en un barrio en su mayoría obrero, que no podía colaborar en la medida de sus deseos, pero poco a poco, se fueron logrando los objetivos.

Gracias a la colaboración entusiasta de todo el pueblo de Gijón y con la ayuda de sesenta mil pesetas que logró del Gobierno el Senador del Reino Excmo. Sr. D. Casimiro Domínguez Gil, a quien había acudido el párroco D. Ángel Valdés, con la confianza que le daba el ser su hermano político, se logró levantar el templo que había de ser  calificado como la “ la Iglesia más bella, sin duda, de la villa”.

Celebraciones religiosas se anunciaron para celebrar el importante acontecimiento de la consagración del nuevo templo. El viernes día 9 de agosto tuvo lugar la solemne consagración y posterior traslado del Santísimo y, al día siguiente, 10 de agosto de 1901, festividad de San Lorenzo, tuvo lugar la inauguración oficial y solemne del templo con misa Pontificial presidida por el Sr. Obispo Dr. Fray Ramón Martínez Vigil acompañado de su primer párroco D. Ángel Valdés.